
Los experimentos, por muy pequeños que sean, suelen fascinar a los niños de cualquier edad.
¿Pero por qué?
Como ya sabemos, los niños son curiosos per se. A través de pequeños experimentos cotidianos van conociendo de manera intuitiva su entorno. ¿Qué pasará si quito esto de aqui?
Los experimentos tienen procesos exitantes: Medir, pesar, añadir una gotita por aquí, otra por allá, mezclar, agitar …. Por más diferentes que sean los experimentos entre sí, todos tienen algo en común: la incertidumbre del resultado.
Como amante de los experimentos siempre me veo probando nuevas cosas, nuevos procedimientos y materiales para mis talleres.
Como consecuencia de estar rodeada últimamente de niños pequeños, empecé a experimentar con colorantes alimenticios. ¿Por qué? Estos colorantes son un alternativa genial para pintar y jugar con los más peques, quienes tarde o temprano terminan con algún pincel o un trozo de plastilina en la boca.
Después de haber testado la plastilina casera a base de colorante alimenticio – por cierto, ¡es genial!, muuucho más agradable al tacto que la comercial – sigo ahora con estos dos mini experimentos.
Experimento de leche con colores
Este experimento es super sencillo. Sólo hay que llenar un plato hondo con algo de leche y añadir algunas gotas de colorantes.
Dale un palillo o bastoncillo al niño para que vaya removiendo los colores. ¿Qué pasará?
Tiene algo de mágico ver cómo el colorante flota encima de la leche y cómo los colores se van mezclando poco a poco…
Podéis hacer el mismo experimento con agua. ¿Y, cómo crees que será el resultado?
Mientras que con la leche el color “flota” en la superficie, en el agua se hunde y se disuelve…..
Si tu niño aun es muy pequeño es una buena oportunidad para introducirlo a la mezcla de colores.
¿Dónde conseguir el colorante alimenticio?
¿No sabes muy bien dónde comprar colorante alimenticio? En muchos supermercados puedes encontrarlos en la sección de repostería. Desde que los cupcakes se han puesto de moda es mucho más fácil de encontrarlos. Otra opción es recurrir a Amazon.
Hielos de colores
¿Alguna vez le has dado color a tus cubos de hielo? ¡No! Entonces es una buena ocasión para realizar esta simple receta con tus hijos.
Ellos disfrutarán tanto con la propia preparación del hielo colorado, como con su utilización para pintar. Pintar mientas que los cubos de hielo se van derritiendo y mientras que se resbalan sobre el papel, convierte el acto de pintar en toda una experiencia.
Instrucciones:
Hay que llenar la cubitera de hielo con agua y añadir unas 4-6 gotas de colorante alimenticio. Mientras más gotas añades, más intenso será luego el color para pintar. Meter la cubitera en el congelador.
Para manipularlos los cubos de hielo con más facilidad a la hora de pintar es recomendable añadir unos palillos de helado (o parecido). Para ello tienes que sacar la cubitera tras 30-45 minutos del congelador cuando el agua está semi-congelado. Introducir los palillos.
También puedes prescindir de los palillos. Así el proceso de pintar se volverá más sensorial y será todo un desafío desplazar con las manos la pintura congelada.
¡Disfrutad experimentando!
¿Qué te parecen estos experimentos con colorantes alimenticios?
¿Cómo te han salido? ¿Has tenido dificultades?
Cualquier duda, pregunta o feedback que tengas compártelo en los comentarios.